Radio en vivo

Un siglo de historia y esplendor: el Palacio Municipal de Quibdó, guardián de la memoria chocoana

En el corazón de Quibdó, un testigo silencioso de un siglo de transformaciones se prepara para celebrar su centenario. El próximo año, el Palacio Municipal, antes conocido como la Escuela Modelo, cumplirá 100 años desde su inauguración en 1926. Más que una simple estructura, este edificio es un faro de la historia local, un símbolo del progreso y un tesoro arquitectónico que ha resistido la prueba del tiempo.

Concebido por el visionario ingeniero catalán Luis Llach Llostera, la construcción del edificio comenzó en 1923. Su diseño, en un imponente estilo neoclásico, lo convirtió en una de las primeras edificaciones de la ciudad construida enteramente en concreto. Su inauguración, el 15 de noviembre de 1926, marcó el inicio de una nueva era para la educación en Quibdó, ya que finalmente reunió en un solo lugar a las escuelas que antes funcionaban en casas alquiladas. El proyecto fue liderado por Jorge Valencia Lozano, director de la Junta de Obras, demostrando la visión de una comunidad comprometida con el futuro de sus niños.

De Escuela a Palacio: un legado en constante evolución

La historia del edificio es un reflejo de la evolución de la ciudad. Después de servir como sede escolar hasta 1941, la construcción del Barrio Escolar bajo la administración de Dionisio Echeverri Ferrer permitió su transformación. En 1943, el edificio asumió un nuevo rol, albergando las oficinas de la alcaldía municipal, y en 1945 el salón de fiestas se convirtió en la sede del Concejo Municipal.

A pesar de las diversas intervenciones que ha sufrido a lo largo de los años, el edificio ha logrado conservar su fachada original y su imponente presencia. Su arquitectura republicana, elegante y sobria, sigue siendo una referencia obligada en el paisaje de Quibdó.

Patrimonio Nacional: un tesoro que debemos proteger

La importancia del Palacio Municipal trasciende lo local. En 1998, fue declarado Bien de Interés Cultural del ámbito Nacional junto con otras cuatro edificaciones emblemáticas de la ciudad. Esta designación no es solo un reconocimiento a su valor histórico y arquitectónico, sino también un llamado a la acción para su preservación. El conjunto arquitectónico cuenta con un Plan Especial de Manejo y Protección (PEMP), una herramienta vital para garantizar que su legado perdure por muchos siglos más.

El centenario del Palacio Municipal de Quibdó es más que una simple celebración. Es una oportunidad para reflexionar sobre nuestra historia, reconocer el valor de nuestro patrimonio y reafirmar nuestro compromiso con su protección. Es un recordatorio de que las edificaciones no son solo ladrillos y cemento, sino testigos de la vida, los sueños y la identidad de un pueblo. El Palacio Municipal, con su grandeza y su historia, es un testimonio vivo de la resiliencia y la riqueza cultural de Quibdó, y su centenario nos invita a mirar con orgullo hacia el pasado y con esperanza hacia el futuro.

Click Here
Click Here
Click Here
Click Here
Click Here
Click Here
Click Here
Click Here
Click Here
Click Here
Scroll al inicio