Search

UNA NUEVA ESPERANZA PARA Y POR EL CHOCÓ – Quibdó y la nueva fuerza social esperanzadora. Por: Yan Ramos


Como parte de esa “una nueva fuerza social esperanzadora” que anhelamos se dé en este nuevo periodo gubernamental 2024-2027 y como debemos ser conscientes que “las necesidades del Chocó son supremamente grandes y no alcanzan ni los recursos ni el tiempo”, se debe priorizar lo necesario: “lo urgente mata lo importante”. Por eso, he propuesto que se prioricen uno u otro lugar dentro de cada subregión, los que he denominado como Pilotos de Trabajo o Zonas Comunes de Trabajo: Atrateños (Quibdó, El Carmen de Atrato, Medio Atrato, Río Quito), Futuro Chocó (Riosucio, Bojayá, Carmen del Darién, Belén de Bajirá), Diralcun (Atrato, Lloró, Cértegui, Unión Panamericana), Basán (Medio Baudó, Bajo Baudó, Istmina, Condoto, Medio San Juan, Tadó), Nosán (Nóvita, San José del Palmar) Vía al Mar (Juradó, Bahía Solano, Nuquí, Cantón de San Pablo, Alto Baudó) y Sisán (Sipí, Litoral del San Juan).
En Atrateños, hoy hablaré de Quibdó, la que Hansel Camacho en su canción “Semblanzas” la definió como “Hidalgo y Señorial, pueblito de añoranza” donde anteriormente “Tus esquinas cantan un son en noches de guitarras”, pero que hoy en día, tiene una situación muy diferente. Y por eso he recomendado en varias ocasiones, que todos, especialmente las nuevas generaciones como en el pasado escrito, lean y analicen muchas publicaciones locales, nacionales e internacionales que hablan de nuestras potencialidades y de nuestro pasado progreso: “Quibdó: sueño y realidad arquitectónica” del Banco de la República (Quibdó), “Quibdó cosmopolita” de Fernando Mora Meléndez y “Sirio-libaneses en el Chocó, cien años de presencia” L.F.G. Escobar, entre otras que destacan el “período de prosperidad” y “auge y caída” de ese desarrollo (¿?). De allí que el profesor Carlos Arturo Caicedo Licona en su libro “En torno al desarrollo del Chocó” resaltó aquellas épocas de amplia prosperidad económica: “me aterroriza que este pueblo vaya a perecer… sin que a nadie le importe…Cada chocoano que nace desarrolla un juicio recortado por el estrecho marco aldeano en que se desenvuelve y termina pensando que aquí no ha pasado nada, que nuestra sociedad ha sido siempre así… pero ya el Chocó vivió su apertura económica. Este pueblo estuvo comerciando protagónicamente en el río y el mar. Este pueblo ya fue internacionalista”.
Lo que, de una u otra forma, y como capital del departamento, desde 1995, las sociólogas Myriam Jimeno, María Lucía Sotomayor y Luz María Valderrama en su libro “Chocó: diversidad cultural y medio ambiente”, habían manifestado que “Quibdó es un laboratorio de adaptación del hombre campesino a un hábitat urbano y que lamentablemente como epicentro regional, condensa los problemas que llegan con los cambios”. Lo que ha hecho que lleguen nuevos habitantes y la ciudad crezca para todos lados y se estén dando esos problemas que llegaron con los cambios (pero aquí como a nada se le para bolas y no se planifican los pronósticos de los expertos, como lo mantiene planteando mi colega y Mag. en Gestión del Riesgo y Desarrollo Jhon Arley Palacios Moreno (“fe en la causa”)). Lo que yo defino, hasta la fecha, como “los siete puntos de expansión urbana de Quibdó”: 1. La carrera primera, los sirios-libaneses y la “ciudad prospera”; 2. Anillo central, de la carrera 1 a la 7 y de calle 24 a la 31; 3. Anillo ampliado, subiendo hasta la UTCH, aeropuerto y bajando hasta la carrera 7; 4. Periferia, crecimiento desordenado a lo largo y ancho; 5. Expansión a Obapo-Pandó, lenta por relieve y otros factores sociales; 6. Expansión Sur, desde UTCH a Cabí y km 7 vía Quibdó-Yuto; y, 7. Diralcun (Desarrollo Integral Regional de los municipios de Atrato, Lloró, Cértegui y Unión Panamericana), crecimiento a vía Yuto, como zona de gran expansión científico-tecnológica-industrial-agroambiental-turística (km 18). Al respecto, estos días el profesor-historiador Sergio Mosquera me comentaba su clasificación y parecía a mis puntos de expansión, habla de: “1. El damero hispánico (cuadrado típico de la colonia en Latinoamérica); de las carreras primera hasta la tercera y de las calles 27 hasta la 20. 2. La gente del bosque adentro; de la carrera cuarta hacía la Yesca. 3. Lo humedales; lo que se rellenó en San Vicente, 4. La meseta; la población de partes alta de Niño Jesús, La Playita y Medrano. Etc., etc.”. Por eso insisto en conocer nuestra historia para planear acciones de hoy en adelante.
Situación que incluye en nuestra actual situación social y que debemos apuntar a la solución de la misma. Lo que me llevo a plantear en un Foro titulado “la ruta hacia las Smart Cities: migrando una gestión tradicional a la ciudad inteligente” del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) sobre los “tres grandes retos que tu ciudad necesita”: seguridad-empresa-empleo. Aquí viene el dilema de “¿Quién fue primero la gallina o el huevo?”: ¿la seguridad o las empresas? Porque se dice que, si la primera no llega la segunda tampoco y viceversa. Además, también pregonamos que “sin energía, internet, carreteras, acueducto, etc., etc., no somos competitivos”. Y estas afirmaciones me recuerdan de las palabras de Christian Daes, presidente de Tecnoglass, una de las empresas más importantes del país: “estoy mamado de los empresarios colombianos (chocoanos) llorones. Siempre están esperando la situación ideal que no existe, no hay nunca una situación ideal, cuando Tecnoglass empezó no había alcantarillado, no había agua, no llegaban los postes de la luz, no había teléfono en donde nosotros nos instalamos, y nosotros llevamos, alcantarillado, construimos una fosa, el agua lo traíamos de carrotanque diarios, la luz tuvimos que poner 26 postes y trajimos el desarrollo”. Lo que igualmente me lleva a pensar, que, si bien somos una región “pobre”, hay personas con algo de riqueza que unidos pueden aportar a estos propósitos. Una de las conclusiones del anterior foro fue que “Ciudades inteligentes exigen ciudadanos inteligentes”. Por ello, el próximo alcalde debería centrarse en estos temas. Son de vital importancia para la solución de los principales problemas que tenemos en la ciudad. Para que al menos “pasemos de ser una ciudad pequeña a una ciudad intermedia”. Porque al revisar las “20 ciudades intermedias que impulsarán el crecimiento del país”, tenemos a: Girón, Floridablanca, Piedecuesta, Barrancabermeja, Buenaventura, Palmira, Tuluá, Bello, Itagüí, Envigado, Apartadó, Turbo, Tunja, Valledupar, Pereira, Manizales, Montería, Neiva, Yopal y Pasto. Y yo incluyo a Rionegro (Valle de San Nicolás) y Armenia (Eje Cafetero). Como se puede observar, ninguna del Chocó. Por ello, al ingeniero “Teddy” Bolaños y su propuesta de “Recuperemos a Quibdó” le quedan estas tareas:

  1. Mejorar la tranquilidad de los ciudadanos (inseguridad)
  2. Mejorar la adquisición de recursos económicos legales, que garanticen el cumbrimiento personal de las NB, a través de motivación y facilitación para el fortalecimiento y generación de empresas que comercialicen nuestra sociobiodiversidad (variedad de recursos naturales y talento social)
  3. Mejoramiento de la prestación de servicios de salud pública y privada que eviten los actuales problemas.
  4. Visión de ciudad moderna y creciente con gobernantes y ciudadanos, que garanticen mejores servicios públicos (energía, Internet, aseo, movilidad, etc.).
  5. Mejoramiento y creación de infraestructura pública (vías, parques, escenarios deportivos, etc.)

De ellas, yo priorizo el fortalecimiento del liderazgo empresarial de una, dos o tres empresas a base del aprovechamiento de nuestros recursos, que consolidemos un negocio, que, entre otras, genere empleos y ayude a reducir los negativos índices que tenemos. Urgen empresas de un solo producto que abarque toda la cadena, que toda la comunidad se mueva y sienta que vive en torno a él. Que sea el motor. Que uno llegue y toda la economía sea entorno a ese producto. Se vean hectáreas de ese cultivo. Entre dichas empresas, fortalecer emprendimientos que ya vienen siendo fuertemente trabajados y, podríamos decir, que están a un “pelito” de convertirse o consolidarse en empresas para que aporten a lo antes mencionado. Tenemos experiencias exitosas con las bebidas tradicionales del viche (Vigua, Canao, Don Pana y Viche Experiencia), pasabocas de nuestros productos agrícolas (RíoChips, deshidratados Ananas), nuestra gastronomía (Pasteles Doña Ana, la Cúrcuma y la “popochoharina” La Promesa), el ecoturismo, la madera y el agua, entre otra decena de iniciativas que cada día veo (y muchas otras que desconozco) que se ofrecen en diferentes medios. “Pero ¿dónde vamos a hacer eso?”, muchos estarán diciendo. Yo he propuesto que se implemente un Parque Empresarial Agroambiental e Industrial del Chocó (PAICH) en, lo que a mi parecer es la mejor zona de expansión urbana y crecimiento económico del Chocó, Diralcun que les ubiqué anteriormente y ampliare la próxima semana. Pero a mi pesar me informan que tiene un gran lío: “el municipio de Quibdó no tiene territorios para dónde crecer y desarrollar estrategias industriales, pues el área propuesta es de propiedad privada y titulada colectivamente a los Consejos Comunitarios. Bueno, más tarea y gestión para la próxima administración, hay que aprovechar el impulso y credibilidad que inician.
De seguro hay muchas más tareas, pero lo importante es que tenemos ahora más que nunca gobernantes con una alta formación y liderazgo, mandatarios de corte internacional, de visión holística, visión mundial; que pueden ayudar a mejorar procesos, que tienen la capacidad de hablar con sus pares de grandes latitudes para que sean tenidos en cuenta en grandes cumbres y reuniones nacionales, latinoamericana y mundiales y esto nos permite aportar y estar presente en la toma de decisiones decisivas como las inversiones nacionales o extranjeras en el territorio, que podemos contar con su apoyo y respaldo para asertivas y necesarias acciones que permitan invertir los recursos bien y en lo que se necesita. Que tienen la capacidad de conversar, de argumentar; de sostener una discusión con hechos, fundamentos, datos, fechas, citas; con conocimiento de nuestras realidades geográficas, históricas, económicas, sociales, políticas, etc.; que la palabra los mueve. Al menos, tienen “sentido común”, ganas, actitud, disposición y quieren realmente apostarle al desarrollo socioeconómico que por este medio les he venido diciendo. ¡Al menos, eso creo!

.

Click Here
Click Here
Click Here
Click Here
Click Here
Click Here
Click Here
Click Here
Click Here
Click Here
Previous slide
Next slide
Scroll al inicio
Abrir chat
Hola
¿En qué podemos ayudarte?