Estos días pensaba sobre qué escribir y si vale la pena “insistir, persistir y resistir” por sueños regionales, que parecen que nunca se van a lograr. Evaluaba lo hecho y dicho en estos últimos tres años y concluyo que hay sus cosas buenas: mucha gente me anima, se han escrito libros y artículos, me han contratado en algunas instituciones para llevar el mensaje, consultas de varios sectores, etc. ¡no todo ha sido en vano! Pero toca hablar del tema de moda: las elecciones regionales y no tenía ideas sobre qué. Por lo que el escrito del profesor Marco Aurelio Guío Ledesma en el semanario Chocó 7 días titulado “Ideas para un plan de desarrollo de Quibdó”, me motivaron a presentar estas líneas. Y como todo sabemos que el Chocó, a pesar de tener una alta diversidad social y ambiental, carece de un alto crecimiento y de grandes opciones de desarrollo; lo que le ha generado una grave crisis institucional, social, económica y política, que hoy es considerado como una “carga estatal y un fracaso como entidad autónoma e independiente”, siendo cada día amenazado su continuidad como ente territorial de la República de Colombia en la actual década. Por lo que, puesto en el zapato de los candidatos-gobernantes, es también muy complicado liderar este barco; por eso cualquier cosa que se logre hacer es de por sí ya ganancia. Sin embargo, pienso que hoy en día, más que nunca, necesitamos de un verdadero líder-visionario; que despojado ya de los compromisos de campaña (imposible), pueda ejecutar algunas acciones concretas y realizables; que como dicen los expertos, sean “posibles, medibles, cinegéticas y monitoreables”. Que no se proponga tanta “cháchara” que confunde y embolata, porque pareciera que un programa de gobierno permite “colgar” muchas cosas irrealizables.
Y muestra de ello, el compañero Wilber Castillo, experto regional en el tema, realizó una rápida consulta en el ChaGPT de la Inteligencia Artificial sobre un “Programa de Gobierno para Gobernación del Choco” y el resultado arrojó todo un texto para armar un documento completo y el “perezoso” copia y pega tal cual; lo cual, entre otras, plantea que “Un programa de gobierno para la gobernación del Chocó debe abordar una serie de desafíos específicos que enfrenta esta región de Colombia, que incluyen la pobreza, la falta de acceso a servicios básicos, la violencia y la protección del medio ambiente. A continuación, te proporciona una visión general de lo que podría incluir un programa de gobierno para el Chocó: 1. Desarrollo Económico y Empleo (Fomentar la inversión en sectores estratégicos como el turismo sostenible, la pesca, la minería responsable y la agricultura; Promover el acceso a crédito y capacitación para emprendedores locales; Establecer alianzas con el sector privado para la creación de empleo y el desarrollo económico), 2. Educación (Mejorar la calidad de la educación en la región, incluyendo la capacitación de docentes y la construcción de infraestructura educativa; Garantizar el acceso a la educación para todos los niños y adultos, incluso en zonas rurales y remotas), 3. Salud (Fortalecer la infraestructura de atención de salud, construyendo hospitales y centros de médica en áreas necesitadas; Implementar programas de prevención de enfermedades y promoción de la salud; Garantizar el acceso a servicios de salud de calidad para todos los residentes), 4. Infraestructura y Servicios Básicos (Mejorar la infraestructura vial para facilitar el transporte de personas y mercancías; Ampliar el acceso a servicios públicos como agua potable y electricidad en áreas rurales), 5. Medio Ambiente y Sostenibilidad (Promover la conservación de los ecosistemas del Chocó, que son ricos en biodiversidad; Implementar políticas de manejo forestal sostenible y protección de recursos naturales; Fomentar prácticas agrícolas sostenibles y la gestión adecuada de residuos), 6. Seguridad y Paz (Trabajar en estrecha colaboración con las autoridades nacionales y locales para mejorar la seguridad en la región; Fomentar programas de reconciliación y construcción de paz en comunidades afectadas por el conflicto armado), 7. Participación Ciudadana (Promover la participación activa de la comunidad en la toma de decisiones gubernamentales; Establecer mecanismos de rendición de cuentas y transparencia en la gestión pública), 8. Cultura y Turismo (Resaltar la riqueza cultural y étnica del Chocó, promoviendo el turismo cultural y comunitario; Apoyar la preservación de tradiciones y lenguas indígenas), 9. Desarrollo Social (Implementar programas de atención a grupos vulnerables, como mujeres, jóvenes y personas desplazadas; Fomentar la igualdad de género y luchar contra la discriminación). Concluye la consulta diciendo que: “Este programa de gobierno debe ser desarrollado en estrecha consulta con las comunidades locales y adaptado a las necesidades específicas de la región del Chocó. Además, es fundamental contar con un plan de financiamiento sostenible para llevar a cabo estas iniciativas y mejorar la calidad de vida de los habitantes del Chocó”.
En ninguno de los programas de gobierno se habla concretamente de lograr dos paradigmas básicos del desarrollo: felicidad y bienestar. Eso es lo que necesitamos los chocoanos basados en tener unas necesidades básicas satisfechas (NBS). Por ello, se puede apreciar que hasta el ChatGPT es más concreto que muchos programas presentados por los actuales candidatos. Entonces, teniendo en cuenta lo que he venido pregonando desde el 2020 y en concordancia con lo anterior, sobre todo que en nuestra región “lo urgente mata lo importante”, a la par de lo anterior, he propuesto centrarnos en:
- Generar un “ecosistema diferente”, donde en primer lugar, se trabajen mucho los temas de mente-mentalidad-comportamiento-actitud. Que eso sirva de base para continuar con los demás o de nada servirán tantas acciones, sino beneficiar a unos pocos que después se irán de aquí y seguimos cada día peores. Prepararnos para un desarrollo de todos, con todos y para todos. Recordemos que “Ciudades inteligentes, merecen ciudadanos inteligentes”.
- Revisar los procesos de densidad poblacional, porque puede ser un problema para el logro del desarrollo de las regiones, pues la mayoría de la población habitan en pueblos pequeños, dispersos a lo largo de los ríos, quebradas, playas y bosques, en promedio compuestos de unas 100 casas y unos 400 habitantes, y hay que hacer la inversión pública (carreteras, escuelas, centros de salud, telefonía, policía, etc.) y en muchas veces es más demorado, complicado y costoso llegar. A diferencia de lo que pasa en muchos lugares del resto del país, por ejemplo, en la región Andina donde los pueblos tienden a ser más compactos, más poblados y, por ende, las inversiones son más fáciles, ágiles e impactantes. Las políticas gubernamentales son más centradas y el desarrollo es más notable. Por ejemplo: Chocó (11,71 hab/km2; 24 en el P.I.B.) vs. Antioquia (104,98; 2), Risaralda (266,96; 20), Valle del Cauca (204,7; 3), Caquetá (4,61; 27), Putumayo (14,43; 28), Guaviare (1,62; 30) y Vaupés (0,83; 33).
- De acuerdo a lo anterior, se establezca uno u otro lugar dentro de unos Pilotos de Trabajo o Zonas Comunes de Trabajo: Atrateños (Quibdó, El Carmen de Atrato, Medio, Atrato, Río Quito), Futuro Chocó (Riosucio, Bojayá, Carmen del Darién, Belén de Bajirá), Diralcun (Atrato, Lloró, Cértegui, Unión Panamericana), Basán (Medio Baudó, Bajo Baudó, Istmina, Condoto, Medio San Juan, Tadó), Nosán (Nóvita, San José del Palmar) Vía al Mar (Juradó, Bahía Solano, Nuquí, Cantón de San Pablo, Alto Baudó) y Sisán (Sipí, Litoral del San Juan).
- Ejecutar macroproyectos principales: 1. las carreteras, especialmente en la terminación de la vía Pereira-Quibdó-Medellín; 2. la salud, al punto que se prevenga y atendamos oportunamente las enfermedades y evitar remisión con los costos económicos y logísticos que eso conlleva; 3. la educación, como pieza fundamental en el desarrollo sostenible que permita retomar los antiguos esquemas del bachillerato donde se era emprendedor y se generaba empleos inmediatamente al terminar; 4. el fortalecimiento del liderazgo empresarial de una, dos o tres empresas a base del aprovechamiento de nuestros recursos, que consolidemos un negocio, que, entre otras, genere empleos y ayude a reducir los negativos índices que tenemos. Urge empresas de un solo producto que abarque toda la cadena, que toda la comunidad se mueva y sienta que vive en torno a él. Que sea el motor. Que uno llegue y toda la economía sea entorno a ese producto. Se vean hectáreas de ese cultivo.
- Entre dichas empresas, fortalecer emprendimientos que ya vienen siendo fuertemente trabajados y, podríamos decir, que están a un “pelito” de convertirse o consolidarse en empresas para que aporten a lo antes mencionado. Tenemos, por sector, subregiones y a manera individual: las bebidas tradicionales del viche (Vigua, Canao, Don Pana y Viche Experiencia), pasabocas de nuestros productos agrícolas (RíoChips, deshidratados Ananas), educación agroambiental (C.A. Zamia), nuestra gastronomía (Pasteles Doña Ana, la Cúrcuma y la “popochoharina” La Promesa), el ecoturismo (en la “Ruta del Bizcocho” (Diralcun), Ecotour por el Atrato, Jotaudó, Tutunendo, Ichó y hasta El 18 (Tour de Ríos), Tadó y la Costa Pacífica), la transformación y comercialización de productos naturales por subregiones (en la Costa Pacífica la pesca marina y comercialización de mariscos; en el San Juan los metales preciosos y el ñame, la yuca, chontaduro y la piscicultura; en el Atrato el borojó, lulo, plátano, cúrcuma y la pesca continental; en el Baudó el arroz (Arroz Baudó) y el plátano; en el Darién el plátano, banano, cacao y arroz (y el ganado y sus derivados); en el Carmen de Atrato el café, aguacate Hass y frutales y hortalizas de climas templados (La Mansa como piloto de trabajo), y San José del Palmar con plátanos, chontaduros y piscicultura)), transformación, comercialización y transacción de metales preciosos (oro, platino, cobre, etc.), la madera (experiencias de aprovechamiento legal y Planta de Transformación del Mueble y la Madera que ya se cuenta con lo más duro: tener equipos y herramientas de alta tecnología como pocos en Latinoamérica) y el agua (existen algunas empresas). Y otras decenas de iniciativas que cada día veo (y muchas otras que desconozco) que se ofrecen en diferentes medios.
- Desde luego, sumado esto, el internet y al servicio de energía que últimamente fallan mucho, a pesar de las constantes “maniobras y trabajos necesarios” que dicen realizan las empresas “encargadas”.
De todas maneras, para la próxima semana resumiré las propuestas de los candidatos inscritos, enfatizando en los que actualmente se mantienen, para analizar la semejanza con mis visiones; porque tenemos que hacer algo por el Chocó, la región nos necesita. Pero no solo los gobernantes, todos debemos aportar al deseo de desarrollo sostenible que tenemos o queremos. Es una de las ultimas opciones que nos queda. #PorqueLaAventuraApenasComienza.