Todos los días los noticieros dan cuenta de acciones positivas por parte de la Policía Nacional; también informan sobre actos que realizan algunos agentes contrariando la misión y el querer institucional, pero digamos que son manzanas en descomposición que no logran empañar el cumplimiento del deber de esa gran institución. A ella llegó, para mi gusto, un gran Director, hombre culto, frentero (nunca ví a un General activo enfrentar sin consideración especial a otro General y éste Director General de esa institución, como lo hizo el actual Director con Atehortua), con grandes rasgos de humildad, como ese gracias mamá..! manifestado a través del micrófono, en un claro reconocimiento y agradecimiento a su señora madre por sus sacrificios, cuando asumía la Dirección de la Policía Nacional.
Esta mañana, al momento de dirigirme a mi oficina para escribir la columna semanal, me encontré con dos patrullas motorizadas atravesando el pequeño puente que une a San vicente con el barrio niño Jesús; nos detuvimos dos metros antes del puente para darles paso a tres motos y a ellos, los Agentes de la Policía, y en esos pocos segundos sentí tranquilidad, alivio, agradecimiento y casi que emoción, al verlos pasar en cumplimiento de su deber institucional. Usted como yo, ante la arremetida de la delincuencia, siempre piensa es en la policía; si hay un sospechoso, un hurto, un homicidio, etc., usted no dice llamen a la fiscalía, al CTI, al Ejército..! no, usted y yo pensamos en forma casi que inconsciente, en nuestra policía nacional: llamen a la policíaaa..!!grita alguien, y hoy, al verlos pasar a mi lado, sentí la necesidad de escribir esta nota, como lo hice también buscando apoyo adicional para el niño Jesús, en un momento determinado.
La captura del asesino de la niña de Cali, homicidio perpetrado la semana pasada, es un éxito rotundo de ese cuerpo armado, así haya sido con la colaboración ciudadana como debe ser, pues han tenido la sabiduría necesaria como para lograr convencer a la comunidad a efectos de que los busque para dar la información requerida; miren que aquí tampoco el ciudadano informante acudió al Ejército o a ninguna otra entidad, llamó a su Policía Nacional. Termino invitando a la comunidad que veamos en los Agentes del orden a un amigo, entre otras cosas, porque esa gran institución está integrada por muchos de los nuestros.