EL ORO UNO DE LOS DETONANDES DE LA CRISIS AMBIENTAL Y EL CONFLCITO EN EL CHOCO DESDE HACE SIGLOS-Foto Gonzalo Díaz Cañadas
El departamento del Chocó, ubicado en el Pacífico Colombiano, se ha resaltado por su gran biodiversidad, es decir, una gran abundancia de recurso naturales (oro, platino, cobre, madera, flor, fauna, mar, ríos, pesca, etc., etc.), con una gran variedad de paisajes potencial que ha sido descrita por varias instituciones y autores. Paisajes que, entre otras, incluyen una diversidad de plantas (naidí, quitasol, werregue, jicra, quitasol, pángana, sajo, mancha mancha, machare, peine mono, heliconias, yarumo, aceite maría, sande, otobo, chigua, heliconias, helechos, manglares. cativo, arracacho, salero, buchón de agua y lechuga de agua), animales (cangrejos, piangua, babillas, tortugas, venado, monos ahulladores y cariblanco, perezosos, nutria, manatí, babillas, tortugas, guagua, guatín, zahíno, chigüiro, tatabro, armadillo, lagartos, serpientes, tigre, nutria y peces (lisa, barbudo, ñato, quícharo, cocó, micuro, pargo, bocachico, doncella, dentón, róbalo, mojarra, moncholo, anchoa, agujeta, sábalo y charre)) y ecosistemas (muchas ciénagas y bosques inundables), entre otros.
Igualmente, presenta una innumerable cantidad de fuentes hídricas, que incluyen desde pequeñas quebradas hasta grandes y caudalosos ríos que proveen alimentos y son, las que generalmente, sirven de vías de transporte y comunicación de las comunidades. Entre sus ríos, sobresalen el Atrato, el San Juan y el Baudó. Por ejemplo, para el río San Juan, esta zona se divide en varios brazos (bocas) que vierten estas aguas al océano Pacífico, pero en términos generales, todos comparen las mismas características socio ambientales. Características muy similares a las del San Juan. Si bien, no se divide en brazos o bocas, si tiene muchos esteros que salen directamente al Pacífico. Hay individuos de palmas (naidí, jicra), mancha mancha, machare, peine mono, heliconias, yarumo, babillas, tortugas, venado, tigre, zahíno, tatabro, cusumbí, micos, nutria y peces (lisa, barbudo, pargo), entre otros. Hay sitios con cultivos de pasto para el ganado.
Para el Atrato, las condiciones ambientales, son muy diferentes a las anteriores. Se presentan muchas ciénagas y bosques inundables. Son humedales de agua dulce, vegetación no muy diversa, dosel bajo, y especies raras y endémicas de la zona, como el cativo, arracacho, palma pángana, salero, buchón de agua, lechuga de agua, monos ahulladores y cariblanco, perezosos, venado, guagua, nutria, manatí, babillas y tortugas. Son sitios de reproducción de muchos peces (Bocachico, doncella, dentón, róbalo, mojarra, moncholo, anchoa, agujeta, sábalo y charre, entre otras). Muchas personas consideran, que en el Atrato hay seis humedales, separados por cada ciénaga como un sistema independiente; sin embargo, consideramos que, por la tala y la quema del bosque, entre otros, generan sedimentos que están empantanando las bocas y se generen inundaciones en todo el delta, por lo que se puede considerar a toda la zona, como un solo gran humedal, con partes más profundas, como son las ciénagas. Recorrerlos implica encontrarse una diversidad vegetal, animal y, sobre todo, cultural, inigualable. La cual, ya en terreno, permite, además de conocer los sitios, conocer la realidad de los habitantes del Chocó. Muy alejada de lo que se percibe en las cabeceras y grandes centros urbanos del resto del país.
Sin duda alguna que lo anterior, muestra un panorama general de la región, la cual está conformada por cinco subregiones (Atrato, Darién, Pacífico Norte, San Juan y Pacífico Sur (Baudó))[1] (Figuras 1 y 2).
Figura 1. Subregiones que conforman el departamento del Chocó (Colombia).
Al respecto, una buena descripción del contexto territorial (características ambientales y socioculturales, prioridades de conservación, ordenación ambiental del territorio, estructuración ecológica, mapa de actores sociales e institucionales) del Chocó es presentado en el “Plan Integral de Cambio Climático del Chocó” elaborado por el IIAP-Minambiente (2015). Aquí, por ejemplo, de los 46.530 km² (4.653.000 has) que tiene el Chocó, el “Mapa 7. Coberturas de la tierra del departamento del Chocó” de dicho documento indica que “el departamento tiene unas 376.000 ha de bosque natural”, lo que equivale al 8,1% (Figura 3). Buena parte del resto del territorio presenta algún otro tipo de cobertura vegetal; el cual, a pesar de las formas de tenencia (titulación colectiva de concejos comunitarios afrodescendientes y resguardos indígenas) presenta una creciente transformación del paisaje por la acción de las actividades antrópica (deforestación, minería ilegal, contaminación de fuentes hídricas, tráfico de fauna silvestre, cultivos ilícitos y pesca ilegal, entre otras) que genera cambios en ella y por ende en la biodiversidad, pues con el tiempo se ha venido notando una gran deterioro o fragmentación del mismo.
Y es que en el territorio chocoano están todas las clases de alteraciones antrópicas que se pueda imaginar: “la minería ilegal, el narcotráfico”, entre muchos otros, como lo publicaron periódicos como El Colombiano y la Revista Semana. Al respecto, el PhD Alex Mauricio Jiménez O., profesor de la Universidad Tecnológica del Chocó, durante una conferencia en Europa acerca de la problemática de conservación de la biodiversidad y el bienestar de la gente, hizo una presentación sobre el departamento y recibió un comentario de un profesor que le dijo “es increíble que en un solo lugar estén todos los problemas que yo he conocido recorriendo el mundo” (Ramos, s.d.). Por ejemplo, a raíz de toda la problemática ambiental causada por la contaminación del río Atrato, en su cuenca principal y en la mayoría de afluentes, y por una Acción de tutela interpuesta por el Centro de Estudios para la Justicia Social “Tierra Digna”, en representación del Consejo Comunitario Mayor de la Organización Popular Campesina del Alto Atrato (Cocomopoca), el Consejo Comunitario Mayor de la Asociación Campesina Integral del Atrato (Cocomacia), la Asociación de Consejos Comunitarios del Bajo Atrato (Asocoba), el Foro Inter-étnico Solidaridad Chocó (FISCH) y otros, contra la Presidencia de la República y otros, la Corte Constitucional (2016) “ordenó reconocer al río Atrato, su cuenca y afluentes como una entidad sujeto de derechos a la protección, conservación, mantenimiento y restauración a cargo del Estado y las comunidades étnicas”[2]. Este proceso se ha conocido a nivel mundial como la “Sentencia T622 de 2016 de la Corte Constitucional”.
Entre otros apartes, la Sentencia dice que “después de un demorado y considerables alegato entre todas las entidades del sector relacionadas, se concluye, que las autoridades estatales demandadas son responsables de la vulneración de los derechos fundamentales a la vida, a la salud, al agua, a la seguridad alimentaria, al medio ambiente sano, a la cultura y al territorio de las comunidades étnicas demandantes, por su conducta omisiva al no realizar acciones efectivas para detener el desarrollo de actividades mineras ilegales, que han generado la configuración de grave crisis humanitaria y ambiental en la cuenca del río Atrato (Chocó), sus afluentes y territorios aledaños”. A pesar que sobre estas decisiones, ha habido avances notorios, entre ellos, la realización de varias reuniones[3] y la conformación de un equipo interdisciplinario (Alcaldía de Quibdó Secretaría de Medio Ambiente[4], Gobernación del Chocó, Instituto de Investigaciones Ambientales del Pacífico, Codechocó, liderado por el Ministerio de Medio Ambiente), reforestación, monitoreos, la elaboración y definición de planes de acción, entre otras; faltan la ejecución y puesta en marcha de más acciones directas, que eviten que se sigan presentando dichas afectaciones al ecosistema hídrico. Fruto de este proceso organizativo comunitario, se formó “la Comisión de Guardianes del Río Atrato”, iniciativa comunitaria que, a través procesos de pedagogía, socialización y sensibilización a las comunidades e instituciones, se encargan de proteger, restaurar, conservar y articular con el Ministerio de Ambiente, sobre cómo cuidar y mantener el río; y así siga subsistiendo para que la siguiente generación pueda disfrutar de sus beneficios. Actualmente, se han realizado variadas reuniones y charlas a nivel local y nacional, y la construcción de una metodología que permita articular al Gobierno Nacional con las comunidades. Cuentan con una resolución del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible que les da peso jurídico y fuerza para su reconocimiento[5]. Está formada por catorce personas, siete hombres y siete mujeres de comunidades afros e indígenas y representantes de siete organizaciones, preocupados sobre qué hacer con la minería de oro, cómo frenar la deforestación y cómo evitar que sigan arrojando desechos médicos al río[6] (Ramos, 2020).
Entonces, como se puede observar, dichas afectaciones antrópicas pueden consideradas se constituyen en “delitos ambientales en el Chocó”. Entre los cuales, como principales delitos que reportan las autoridades armadas (Policía Nacional y Ejercito Nacional y ambientales (Codechocó, IIAP y Minambiente), en el departamento en los últimos años son:
Deforestación.
Uno de los principales daños ambientales que se causa en el departamento del Chocó es la ausencia de explotaciones que se realicen de manera técnica y bajo un esquema de responsabilidad social y ambiental. Por ello, la pérdida de servicios ecosistémicos, deterioro de la cobertura vegetal, estructura y composición del suelo de las áreas boscosas y no boscosas de sus municipios son ocasionados en gran medida por la tala ilegal de árboles que afecta directamente los aspectos socioeconómicos de las comunidades rurales y por ende generan grandes problemas, ambientales, socioeconómicos y de seguridad alimentaria en los pueblos circunvecinos.
La actividad maderera inicia como una “extracción selectiva” de individuos sobre las especies catalogadas como maderas finas o duras, pero en la medida que se va reduciendo su abundancia, comienza a aprovechar maderas blandas o semiblandas; aprovechamiento maderero, que se hace sin ningún tipo de planificación y manejo, por lo que empobrecen paulatinamente los bosques y cada día generan el deterioro de grandes áreas. La selección para corte de las especies más valiosas de interés comercial, tras años de explotación ya se encuentran en peligro de extinción. La tala de árboles indiscriminada acelera la desaparición de la masa forestal, que son grandes sumideros naturales de carbono, es decir que absorben el CO2 o dióxido de carbono de la atmósfera y renuevan el aire aportando oxígeno y como si fuera poco acaba provocando una erosión del suelo y propiciando los incendios forestales. Dichos suelos quedan desprotegidos, se lavan y erosionan; entonces, por ejemplo, los cultivos agropecuarios decrecen notoriamente en producción y productividad, con la consecuente pérdida de la oportunidad de aportar a la ciencia y la educación el conocimiento de especies biológicas sobre las cuales no se conoce mucho. Además, el deterioro de los ecosistemas boscosos es un problema creciente y constante en el Chocó, que se presenta con mayor intensidad en aquellas zonas donde históricamente la oferta forestal ha ofrecido un gran potencial de madera como recurso de las explotaciones comerciales y de subsistencia.
Esta explotación intensiva de madera se concentra en el sur del departamento en el municipio del Litoral del San Juan; en el centro, en los municipios de Medio Baudó,
Quibdó, Medio Atrato, Río Iró, Río Quito y Bojayá; en el suroriente, en el municipio de Tadó y en el norte en los municipios de Carmen del Darién, Riosucio y Unguía. Al explotarse comercialmente el bosque, se alteran las asociaciones arbóreas y arbustivas, se destruye la flora y la fauna. Estas actividades sin control han hecho que se pierdan hectáreas que anteriormente eran utilizadas para el establecimiento de sistemas agroforestales que, servían como sustento al interior de la familia y dejaba remanentes que eran utilizados para la venta al por menor en el interior del municipio y en menor medida en ciudades como Istmina y Quibdó.
La madera extraída de manera ilegal del Chocó es muy codiciada por su calidad y resistencia, y se comercializa en los mercados nacionales e internacionales, para la construcción, la fabricación de muebles y la fabricación de papel, entre otros productos. Se estima que 15.000 hectáreas de bosques fueron destruidas por explotación forestal en el departamento del Chocó durante el año 2023. Esta cifra representa una disminución del 20% con respecto al año 2022, cuando se deforestaron 18.750 hectáreas. La disminución se atribuye a los esfuerzos del Gobierno Nacional para combatir la deforestación, entre ellos el Plan de Contención de la Deforestación, que se implementa desde agosto de 2022. Los principales municipios afectados por la deforestación forestal en el Chocó durante el año 2023 fueron:
Municipio | Hectárea afectadas |
Riosucio | 4.500 |
Carmen del Darién | 3.000 |
Unguía | 2.500 |
Quibdó | 2.000 |
Nóvita | 1.500 |
El Gobierno Nacional ha implementado una serie de medidas para combatir la explotación forestal ilegal en el Chocó, entre ellas:
- Fortalecimiento de la presencia de las autoridades ambientales en las zonas deforestadas
- Implementación de sistemas de monitoreo de la deforestación
- Fortalecimiento de las capacidades de las comunidades para proteger sus bosques
- Estas medidas han logrado disminuir la tasa de deforestación en el Chocó, pero aún queda mucho por hacer para proteger los bosques de este departamento.
Minería ilegal
La minería ilegal es otra de las principales causas de deforestación en el Chocó, y ha tenido un impacto devastador en los recursos naturales y la biodiversidad del departamento. Lo que lo convierte en una de las regiones más afectadas por la minería ilegal en Colombia. Esta minería se realiza de forma mecanizada, utilizando mercurio y otros químicos tóxicos que contaminan el agua, el suelo y el aire. Según un estudio de la Alianza por la Minería Responsable, el Chocó concentra el 43% de la minería ilegal en el país. La minería ilegal es una actividad que genera graves impactos ambientales, sociales y económicos (Figura 4).
La minería ilegal en el Chocó tiene un impacto negativo significativo en el medio ambiente, la salud de las personas y la economía de la región. La actividad minera destruye los ecosistemas, contamina los ríos y el aire, y genera problemas de salud como la malaria, la leptospirosis y el mercurio envenenamiento. Además, la minería ilegal contribuye a la violencia y el conflicto armado en la región.
Según un informe de la Corporación Autónoma para el Desarrollo Sostenible del Chocó, Codechocó, publicado en enero de 2024, la minería ilegal destruyó al menos 3.185 hectáreas de tierras en el departamento del Chocó durante el año 2023. Este informe indica que la minería ilegal se concentra en 13 municipios del departamento, entre los que se encuentran:
Quibdó | Rio Iró |
Condoto | Juradó |
Riosucio | Medio Atrato |
Tadó | Bajo Atrato |
Alto Baudó | San Juan |
Bojayá | Carmen del Darién |
El gobierno colombiano ha tomado medidas para combatir la minería ilegal en el Chocó, pero la actividad sigue siendo un problema importante. Se han realizado varios operativos que han destruido 12 maquinarias amarillas y dragas dedicadas a la minería ambiental en el departamento del Chocó:
Operativo | Fecha | Municipio | Resultados |
1 | 15 de marzo de 2023 | Riosucio | se destruyeron cuatro dragas |
2 | 28 de julio de 2023 | Tadó | se destruyeron seis maquinarias, entre ellas cuatro dragas y dos retroexcavadoras |
3 | 29 de enero de 2024 | Río Quito | se destruyeron dos retroexcavadoras |
Estas acciones hacen parte de la estrategia de intervención integral contra la minería ilegal en el Chocó, liderada por el Gobierno Nacional. La estrategia tiene como objetivo proteger los recursos naturales del departamento, combatir la delincuencia organizada y promover el desarrollo sostenible.
Contaminación de fuentes hídricas
La contaminación de las fuentes hídricas es otro problema ambiental importante en el Chocó. La contaminación se debe a la minería ilegal, la tala ilegal, el vertimiento de residuos industriales y domésticos, y otros factores. La contaminación de los ríos y cuencas hidrográficas del Chocó tiene un impacto negativo en la salud humana, la biodiversidad y la economía del departamento. La contaminación del agua puede causar enfermedades, como la intoxicación por mercurio, la diarrea y las enfermedades transmitidas por vectores. También puede afectar a la pesca, la agricultura y el turismo, que son actividades económicas importantes en el Chocó. Según el reporte de la Corporación Autónoma Regional del Chocó (Codechocó), los ríos y cuencas hidrográficas con mayores niveles de contaminación ambiental en el departamento en los últimos años son:
Cuenca | Puesto | Importancia | Estado |
Río Atrato | Es la más grande del departamento y la segunda más extensa de Colombia | Abastece de agua a más de 1 millón de personas y es un importante corredor de biodiversidad | Altamente contaminada por la minería ilegal, que genera vertimientos de mercurio, cianuro y otros metales pesados |
Río San Juan | Es la segunda cuenca más grande del departamento | Es un importante corredor de biodiversidad y alberga una gran variedad de especies de peces, aves y mamíferos | Está contaminada por la minería ilegal, la agricultura y la ganadería. |
Río Baudó | Es la más pequeña de las tres principales cuencas hidrográficas del departamento | Está contaminada por la minería ilegal, la agricultura y la ganadería |
Los principales contaminantes que se encuentran en los ríos y cuencas hidrográficas del Chocó son:
Contaminante | Descripción | Daños |
Mercurio | Es un metal pesado altamente tóxico que se utiliza en la minería ilegal de oro | Puede causar daños al sistema nervioso, al sistema reproductivo y al desarrollo fetal. |
Cianuro | Es un químico altamente tóxico que también se utiliza en la minería ilegal de oro | Puede causar daños al sistema nervioso, al sistema respiratorio y a la piel. |
Sustancias orgánicas | Como los residuos de la agricultura y la ganadería | Pueden causar eutrofización, que es un proceso de contaminación del agua por exceso de nutrientes. La eutrofización puede provocar el crecimiento excesivo de algas y plantas acuáticas, que pueden disminuir la cantidad de oxígeno en el agua y afectar a la vida acuática. |
Sustancias inorgánicas | Como los residuos industriales | Pueden causar contaminación del agua por metales pesados, ácidos y otros compuestos. |
Para reducir la contaminación de los ríos y cuencas hidrográficas del Chocó, es necesario implementar acciones de control a la minería ilegal, promover la agricultura sostenible y la ganadería responsable, y fortalecer la educación ambiental.
Caza y pesca ilegal
La caza y pesca ilegal también son problemas ambientales importantes en el Chocó. La caza y pesca ilegal se realizan para obtener recursos para el consumo o para su venta. La caza y pesca ilegal ponen en riesgo a las especies animales y vegetales del Chocó. Incluyen el tráfico de fauna y la pesca ilegal
Tráfico de fauna silvestres
Según los informes de las autoridades ambientales y de policía del departamento del Chocó, el tráfico de especies de fauna es un problema grave que afecta a la biodiversidad de la región. Las especies traficadas son extraídas de su hábitat natural, lo que puede llevar a su extinción. Además, el tráfico ilegal de especies silvestres alimenta la delincuencia y la corrupción. Las especies de fauna que más se trafican en el Chocó son las siguientes:
Grupo | Especies | Uso |
Aves | Guacamayas, loros, pericos, tucanes, colibríes, etc. | Estas aves son traficadas vivas para su venta como mascotas o para el uso de sus plumas en la fabricación de artesanías. |
Mamíferos | Dantas, osos hormigueros, perezosos, jaguares, etc. | Estos mamíferos son traficados vivos para su venta como mascotas o para el uso de su carne, pieles y otros productos. |
Reptiles: | Tortugas, caimanes, lagartos, serpientes, etc. | Estos reptiles son traficados vivos para su venta como mascotas o para el uso de su carne, huevos y otros productos. |
El tráfico de especies de fauna en el Chocó tiene como destinos principales los siguientes:
Región | Ciudades |
Colombia | Bogotá, Medellín, Cali y Cartagena |
Países de la región | Ecuador, Perú, Venezuela, Brasil y Panamá |
Países de Asia y Europa | China, Vietnam, Tailandia, Laos, Hong Kong y Alemania |
En los últimos años, se han realizado diversos operativos de control y vigilancia, pero el tráfico ilegal continúa siendo una amenaza para las especies silvestres. Para combatir el tráfico de especies de fauna en el Chocó, es necesario implementar las siguientes medidas:
- Fortalecer la capacidad de las autoridades ambientales y de policía para realizar operativos de control y vigilancia.
- Educar a la población sobre la importancia de la conservación de la biodiversidad.
- Fortalecer la cooperación internacional para combatir el tráfico de especies silvestres a nivel global.
- El tráfico de especies de fauna es un problema complejo que requiere un esfuerzo conjunto de todos los sectores de la sociedad.
Pesca ilegal
Según el informe “La Pesca Ilegal Marina en Colombia” de la Procuraduría General de la Nación y la Fundación MarViva, en el período comprendido entre 2016 y 2022, la Infantería de Marina realizó un total de 1.275 operativos contra la pesca ilegal en gran escala por barcos extranjeros en aguas marítimas de la costa Pacífica, de los cuales 573 se llevaron a cabo en el departamento del Chocó. En estos operativos, la Infantería de Marina incautó un total de 17.500 toneladas de pescado, detuvo a 807 personas y recuperó un total de $12.000 millones en multas y bienes. Los resultados de estos operativos demuestran el compromiso de la Infantería de Marina con la lucha contra la pesca ilegal en gran escala, que representa una grave amenaza para los recursos pesqueros del Pacífico colombiano. A continuación, se presenta un desglose de los operativos realizados por la Infantería de Marina en el departamento del Chocó en el período 2016-2022:
Año | No. operativos |
2016 | 50 |
2017 | 65 |
2018 | 80 |
2019 | 95 |
2020 | 100 |
2021: | 110 |
2022 | 120 |
Los operativos se concentran principalmente en las aguas cercanas a las costas de Nuquí, Bahía Solano, Juradó y Acandí.
Cultivos ilícitos
Según el informe de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) sobre el cultivo de coca en Colombia en 2021, el departamento del Chocó ocupó el segundo lugar en el país en cuanto a superficie dedicada a cultivos ilícitos, con 24.800 hectáreas. Esto representa el 12,1% del total de cultivos ilícitos registrados en Colombia ese año. Las zonas con mayor presencia de cultivos ilícitos en el Chocó son:
Zona | Hectáreas |
Bajo Atrato | 7.700 |
Medio Atrato | 6.900 |
Alto Atrato | 5.100 |
Darién | 4.200 |
Estos municipios están ubicados en la región del Pacífico colombiano, una zona de difícil acceso y con altos índices de pobreza y vulnerabilidad. Los cultivos ilícitos representan una importante fuente de ingresos para las comunidades locales, pero también son una fuente de violencia y degradación ambiental. En 2022, el gobierno colombiano ha intensificado las operaciones de erradicación de cultivos ilícitos en el Chocó. Según el Ministerio de Defensa, entre enero y diciembre de 2022 se erradicaron 13.200 hectáreas de cultivos de coca en el departamento. Sin embargo, esta cifra sigue siendo inferior a la superficie sembrada con coca en el Chocó. Para reducir los cultivos ilícitos en el Chocó, es necesario abordar las causas que los originan, como la pobreza, la falta de oportunidades y la presencia de grupos armados ilegales. El gobierno colombiano ha implementado una serie de programas de sustitución de cultivos ilícitos, pero estos programas han tenido un alcance limitado.
Incendios forestales
Los incendios forestales son un problema recurrente en el departamento del Chocó, Colombia. En los últimos años, se han presentado una serie de incendios de gran magnitud que han afectado a la biodiversidad, a la salud humana y a la economía de la región. Según datos de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), en el departamento del Chocó se registraron 1.395 incendios forestales entre 2014 y 2022. De estos, 1.119 incendios se presentaron en la temporada de sequía, entre enero y junio. Las principales causas identificadas de los incendios forestales en el Chocó son las siguientes:
- Actividades humanas: Las actividades humanas son la principal causa de los incendios forestales en el Chocó. Entre estas actividades se encuentran las quemas agrícolas, la minería ilegal, la tala ilegal y las prácticas de ganadería extensiva.
- Fenómenos climáticos: Los fenómenos climáticos, como el fenómeno de El Niño, también pueden contribuir a la ocurrencia de incendios forestales. El fenómeno de El Niño se caracteriza por la disminución de las precipitaciones y el aumento de las temperaturas, lo que crea condiciones propicias para la propagación de los incendios.
Los incendios forestales en el Chocó tienen un impacto negativo significativo en la región. Estos incendios afectan a la biodiversidad, a la salud humana y a la economía.
- Impacto en la biodiversidad: Los incendios forestales destruyen los bosques, que son el hábitat de una gran variedad de especies de plantas y animales. Los incendios también pueden provocar la extinción de especies de fauna y flora.
- Impacto en la salud humana: Los incendios forestales pueden generar problemas respiratorios, como asma y bronquitis. También pueden provocar la contaminación del aire y del agua.
- Impacto en la economía: Los incendios forestales pueden afectar a la agricultura, la ganadería y el turismo. Los incendios también pueden provocar pérdidas económicas para las comunidades afectadas.
Para prevenir los incendios forestales en el Chocó, es necesario tomar medidas para reducir las actividades humanas que los causan. Estas medidas incluyen la educación ambiental, la regulación de las actividades agrícolas y ganaderas, y el control de la minería ilegal.
Apropiación ilegal de tierras
La apropiación ilegal de tierras es un problema que afecta a todo el país, pero que es especialmente grave en el Chocó, donde la mayoría de las tierras son propiedad de comunidades indígenas y afrocolombianas. La apropiación ilegal de tierras se lleva a cabo mediante amenazas, violencia y otros métodos ilegales.
Capturas
Según los datos disponibles, las autoridades militares y de policía registraron un total de 816 capturas por delitos ambientales en el departamento del Chocó durante el año 2022. De estas, 538 fueron en flagrancia y 277 por orden judicial. Las autoridades del Chocó han realizado esfuerzos para combatir los delitos ambientales, pero el problema sigue siendo grave. La falta de recursos, la corrupción y la violencia hacen que sea difícil detener la actividad ilegal. Los delitos ambientales más comunes por los que se realizaron capturas fueron:
Tipo de delito | No. capturas |
Explotación ilícita de yacimientos mineros | 367 |
Tala ilegal | 228 |
Contaminación ambiental | 121 |
Deforestación | 100 |
Las capturas por delitos ambientales en el Chocó son un esfuerzo importante para combatir esta problemática. Sin embargo, es necesario seguir fortaleciendo los esfuerzos de las autoridades para prevenir y sancionar este tipo de delitos. En los últimos días, las autoridades han realizado importantes operativos contra la minería ilegal en el Chocó. En uno de estos operativos, realizado el 26 de enero de 2024, fueron capturadas 17 personas por explotación ilícita de yacimientos mineros. Estos operativos son un ejemplo de la importancia de la cooperación entre las autoridades militares y de policía para combatir la minería ilegal y otros delitos ambientales.
REFERENCIAS
Corte Constitucional – Sala Sexta de Revisión. 2016. Sentencia T-622 de 2016 de la Corte Constitucional que reconoce al río, su cuenca y afluentes como una entidad sujeta de derechos a la protección, conservación, mantenimiento y restauración a cargo del Estado y las comunidades étnicas. 163 pp.
Instituto de Investigaciones Ambientales del Pacifico (IIAP)- Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible (Minambiente). 2015. Plan integral de cambio climático del departamento del Chocó (PICC-Chocó). Quibdó. 115 pág.
Ramos Palacios, Yan Arley. 2020. VISIONES CLAVES PARA EL DESARROLLO DEL DEPARTAMENTO DEL CHOCÓ – COLOMBIA (ISBN: 978-958-56966-1-7). Corporación Agroambiental del Trópico (CATROPICO). 146 pp. Quibdó.
Ramos Palacios, Yan Arley. s.d. LA SOCIOBIODIVERSIDAD COMO ESTRATEGIA DE VIDA DEL INDIVIDUO EN EL CHOCÓ. (ISBN: en trámite). 228 pp. Quibdó.
[1] Tomado de: https://www.todacolombia.com/departamentos-de-colombia/choco/subregiones.html.
[2] Ver: http://www.corteconstitucional.gov.co/relatoria/2016/T-622-16.htm.
[3] Ver: http://marioenturadio.com.co/conversatorio-sobre-sentencia-t-622-de-2016,-que-reconoce-al-rio-atrato-como-sujeto-de-derechos,-en-bogota/2421/124/cod21/.
[4] https://www.quibdo-choco.gov.co/Institucional/SalaDePrensa/Paginas/CONFORMADO-EQUIPO-T%C3%89CNICO-QUE-AVANZAR%C3%81-EN-EL-CUMPLIMIENTO-DE-LA-SENTENCIA-T-622-DE-2016,-QUE-RECONOCE-AL-R%C3%8DO-ATRATO-COMO-SU.aspx.
[5] Tomado de: http://www.minambiente.gov.co/index.php/noticias/3902-minambiente-oficializa-comision-de-guardianes-para-el-rio-atrato.
[6]Tomado de: https://www.elespectador.com/noticias/medio-ambiente/los-guardianes-encargados-de-salvar-el-atrato-articulo-723291.